CASO ENRON
Antecedentes
En Julio de 1985, Houston
Natural Gas se fusiona con InterNorth, una pequeña
distribuidora de gas natural, para
formar Enron Corporation. La empresa Houston Natural Gas acaparaba
el mercado de este-oeste entre sus principales clientes se encontraban los
estados de Florida y California. Mientras que, InterNorth, acaparaba el mercado
de norte-sur y servían a los mercados de Iowa y de Minnesota. Por lo
cual, al fusionarse ambas compañías logran convertirse en un equiparar el
mercado norteamericano, ya que se complementaban.
En 1989, Estado Unidos afrontaba
una desregularización de la industria del gas natural. Por lo cual, Enron se
convirtió rápidamente en una corporación dedicada al transporte de gas natural
entre diversos estados, a través de una red de gasoductos de 60 mil kilómetros.
Asimismo, la empresa se dedicaba a otras actividades como la explotación de
recursos petrolíferos, distribución energética e incluso realizó exploraciones
en sector de servicios sanitarios electricidad, Internet y los mercados
financieros, con operaciones en más de 30 países.
En 1999, la compañía, se dedicó a
vender y comprar gas y electricidad a los productores y vender a precios más
elevados. Dichas negociaciones se realizaban a través de la plataforma Enron
Online. Dicha plataforma permitía a los clientes realizar transacciones y ver a
tiempo real los precios del mercado. Además, Enron Online llegó a tener más de
6000 operaciones al día.
Su éxito se debe a que la empresa
tenía una estrategia que se basaba en tres actividades fundamentales de
comercialización: energía, mayoreo y servicios globales. Además, su principal
invención fue el trading, pues
consideraban que los “commodities”, podían ser comprados, vendidos y
almacenadas como si fueran acciones y bonos de la bolsa. Por lo cual, llego a
dominar el 25% del mercado de derivados de energía. Dicho éxito que consiguió
la empresa, llevo a que varias empresas emplear la misma estrategia, lo cual
creó un entorno competitivo para la empresa. De este modo, las ganancias de
Enron comenzaron a disminuir, fue así que la compañía comienza a endeudarse con
los bancos, ya que requiera de liquidez instantánea. Es así, que su
apalancamiento fue aumentando, pero la empresa necesitaba mantener su buen estado
crediticio. Para lograr esto, los pasivos de la empresa eran traspasados a
entidades ficticias, lo cual generaba que la deuda no apareciera en los
balances de la corporación. Con dicha hazaña, Enron logró exhibir buenas
utilidades en sus estados financieros.
Dichos factores contribuyeron a
que Enron fuera considerada una de las compañías de energía más poderosas del
mundo, facturando aproximadamente 100 billones de dólares y ser un el foco
principal de los inversionistas. Por ello, la empresa recibió diversos
reconocimientos, que fue otorgado por la revista Fortune, que reconoció a Enron
como la empresa más innovadora entre 1996 – 2001. Del mismo modo, en el 2000,
fue reconocida como la “Compañía de Energía del año”, y a la "mejor y
exitosa decisión de inversión". Pero
todo se termina, el 2 de Diciembre de 2001, pues se comenzó a desmoronar todo
el imperio, ya que salen a la luz los malos manejos de los ejecutivos de la
empresa.
Los principales protagonistas:
Kenneth Lay
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Es el ex presidente y director ejecutivo de la empresa
Enron Corporation, el convirtió a Enron de las compañías energéticas más
influyentes del mundo. En el 2001 fue uno de los encargados de vender gran
cantidad de las acciones de la empresa a sus empleados, pues los incentivaba
argumentando que era una buena oportunidad para ellos. Asimismo, ocultaba y
mentía a los inversionistas sobre los problemas financieros de la
empresa. El 25 de mayo de
2006, fue declarado culpable de fraude.
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Andrew Fastow
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Es el ex director financiero de Enron Corporation, él fue
el encargado diseñar varios sistemas para ocultar deuda de la empresa.
Asimismo, se le acusó de lavado de dinero, fraude y manipulación de los
estados Financieros de la compañía.
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Jeff Skilling
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Fue el ex director ejecutivo de la empresa Enron,
sucesor de Kenneth Lay. Se le acusa confabulación, estafa de valores,
transacciones ilegales con información privilegiada y mentir a los auditores.
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David Duncan
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Director ejecutivo y jefe auditor respectivamente
de la consultora Arthur Andersen,
responsable de la veracidad de los registros contables.
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El inició de las operaciones de Enron
A inicios el Congreso norteamericano
no aprobó una ley que no permitía la exclusividad en el uso de gasoductos y
alentaba a la competencia en ese mercado, por lo cual la empresa tenía que
crear una nueva estrategia que pudiera vencer a la competencia y generar
ganancias para la misma. Por lo tanto, el presidente Kenneth Lay contrató a Mckinsey,
quien designo al consultor Jeff Skilling la tarea de diseñar una nueva
estrategia. Skilling tenía un gran talento en cuanto a técnicas financieras y
bancarias, por lo cual dicha destreza ayudó a la compañía a visualizarse como
“como un banco de gas”. Por ello, la visión de la empresa cambio rotundamente.
Jeff Skilling comenzó a contactar los
más dotados de las universidades de negocios, convocada y arrebataba a los
mejores candidatos de los bancos de inversión, para luego poder transformarlos
los corredores de la empresa. Pero una de sus grandes contrataciones fue la de Andrew Fastow, un
empleado del Continental Illinois Bank, quien años más tarde se convierte en el
principal ejecutivo financiero de la empresa.
Es así que se forman este poderoso
grupo de ejecutivos, la estrategia que Jeff Sklling proponía era del negocio de líneas de conducción de
gas: crear un “banco de gas”, el cual consistía en que Enron adquiriría y
compraría gas a una red de proveedores, después lo vendería a una red de
consumidores. Por lo cual, la empresa ya se aseguraba un contrato con los
proveedores y consumidores. Gracias al ingenio de Skilling, la compañía creó un
nuevo concepto para la industria: “el derivado de energía”. Es así, que en 1990
el presidente Kenneth Lay funda Enron Finance Corporation, la cual
comienza a dominar el mercado de los
contratos de gas natural, con más clientes y proveedores, y así logró grandes
ganancias.
(Escrito por : Solange Castillo)
Todo marchaba
de maravilla
Las operaciones marchaban de la
mejor manera, Enron era vista como una verdadera pionera en el mercado, al
comercializar el gas natural como un “commodity”. Enron Finance Corp. bajo el
liderazgo de Skilling, pronto llegó a dominar el mercado de los contratos de
gas natural, con más proveedores, más acceso suministros y más clientes, muy
por encima de sus competidores.
Para el año 1997, Enron adquiere
la compañía Portland General Electric Corp. de servicios eléctricos, por cerca
de 2 mil millones de dólares. Para fines de ese año, se desarrolló Enron
Capital and Trade Resources, perfilándola como la más grande compradora y
vendedora de gas natural y electricidad de la nación. Bajo el mismo concepto
del “banco de gas”, Skilling estaba listo para crear mercados de cualquier recurso
que estuviere dispuesto a comercializar. Y es a partir de ese momento, donde
Enron empieza a adquirir empresas de otros países y va formando sus propias
compañías en diversos países y en distintos rubros, convirtiéndose en una
compañía diversificada a nivel mundial.
Malas
prácticas
A mediados de los años noventa,
Skiiling incorporó a la empresa la “Contabilidad de ajuste a valor de mercado”
para el negocio de comercialización de energía. Bajo este sistema, siempre que
las compañías presenten contratos vigentes relacionados con energía u otros
derivados al final de un balance trimestral, debían ajustarlos a valor
razonable del mercado, de manera que se contabilicen las ganancias o pérdidas
no realizadas al estado de resultados del período. Esta metodología permitió a
Enron obtener hoy los beneficios futuros potenciales de la compañía y poder
transarlos a un precio al día. A pesar de sus ingresos bajos, Enron podía
vender al precio que deseara con la garantía de beneficios futuros, este método
sin duda era muy subjetivo y sensible a ser manipulado.
Debido a la naturaleza de su
negocio, Enron requería enorme liquidez o un rápido acceso a los mercados
crediticios. Sin embargo, Enron presentaba altos niveles de endeudamiento lo
que dificultaba un acceso más sencillo a los créditos. Para satisfacer a las
agencias de calificación de riesgo, esta tenía que asegurar que las razones de
apalancamiento de la compañía se encontraban dentro de los límites aceptables.
Fastow negociaba para aumentar su riesgo crediticio con las calificadoras pero
no lograba resultado, finalmente, encontraría una solución en las sociedades de
propósito específico (SPE), para acceder a capital y disminuir riesgos. Enron
utilizaba estas entidades para acceder a créditos más rápidos y sobretodo, para
traspasar a estas entidades las deudas incurridas por la compañía, es decir
todas las pérdidas se encontraban fuera de los libros contables de Enron. Le permitía a la compañía incrementar el apalancamiento y
ROA sin tener que reportar esto como deuda en el balance general. Para
el año 2011, el negocio de Enron era cada vez más complejo y en este proceso había
creado más de 3000 SPS’s, unidas a través de holdings, lo que hacía
prácticamente imposible poder auditarla, prestándose a ser escenario se
irregularidades por parte de la compañía.
Pero esto no sería todo, Enron
organizó sistemáticamente la evasión fiscal. Creó 881 subsidiarias en paraísos
fiscales y usó otros trucos contables para esconder ingresos, esto le permitió
no pagar los impuestos sobre ingresos al Tesoro estadounidense durante los
últimos cinco años de su existencia. Dentro de esta complicada estructura,
Enron tenía 692 subsidiarias en las Islas Caimán, otras 119 en Turks y Caicos,
43 en la isla Mauricio y 8 en las Bermudas, es todos estos países los impuestos
eran nulos.
Inicio de la
crisis
A partir de junio de 2001 se
precipitó el declive de la empresa debido a un entorno de mayor regulación en
el estado americano. En los últimos años, Enron se había convertido en un
importante actor político, durante el periodo 1999-2000, gastó alrededor de 3
millones y medio de dólares con el objeto de obtener una mayor desregulación
del mercado de la energía en los Estados Unidos, esta mayor regulación iba a
significar un serio problema en el control del manejo de sus cuentas. Sin
embargo, la crisis venía desde hace meses, la capitalización bursátil de la
empresa, como el de la mayoría de empresas estadounidenses tendía a caer. A fin
de que sus acciones no se vieran perjudicadas, los directores de Enron inflaron,
las cuentas artificialmente, registrando como ingresos préstamos bancarios y
borrando directamente las pérdidas presentadas en su balance. Con el objetivo
de mantener una cotización bursátil elevada, la dirección llevó a Enron a
comprar sus acciones masivamente. Para julio de 2001, Kenneth Lay, presidente
de Enron, invitaba a sus empleados a comprar acciones de Enron, mientras que al
mismo tiempo las vendía ocultamente, obteniendo ganancias importantes en
relación al precio al que las había adquirido. En el período noviembre
2000-julio 2001, Lay llegó a vender 672 mil acciones de Enron, esto produjo la
caída estrepitosa de las acciones de la empresa. Los empleados de la empresa no
podían ejercer el derecho de vender sus acciones porque el fondo de pensión
Enron había sido declarado en reestructuración y todas las operaciones se
encontraban bloqueadas.
Fin de la
crisis
Esta situación se agravaría en
julio del 2001 ante la renuncia de Jeff Skilling, esta noticia generó pánico en
los mercados. En agosto de ese mismo año, Sherron Watkins, VP de Desarrollo
Corporativo de Enron, entrega antecedentes a Kenneth Lay sobre ciertas irregularidades
encontradas en la compañía. La firma Arthur Andersen, una auditora externa, era
la encargada de certificar los informes
financieros presentados por la empresa. Esta auditoría había estado actuando en
complicidad con Enron, recibiendo a cambio 52 millones de dólares, por ocultar
sus irregularidades y presentar una correcta contabilidad de la firma. James
Hecker, socio de la firma auditora, al estar al tanto de cada una de las
operaciones realizadas, antes las acusaciones presentadas por Watkins, hizo
caso omiso y destruyó toda la información contable de la compañía.
En
octubre de 2011, Enron anuncia una pérdida neta de 618 millones de dólares en
el tercer trimestre, lo que originó como consecuencia que se iniciaría luego
una profunda investigación a cargo de la “Comisión de Bolsa y Valores” de
Estados Unidos, en donde saldrían a la luz las numerosas prácticas irregulares
realizadas por la empresa como la destrucción de documentos, manipulaciones
contables, beneficios inflados, ocultación de información e irregularidades en
la compleja red de sociedades creadas (SPS’s).Finalmente, en diciembre del 2001, el valor de la bolsa
cayó en 68%, por tanto, el precio de las acciones se desplomaron de $90 dólares
a $0.42 dólares.
Al
descubrirse cada una de las irregularidades realizadas, Enron era declarado en
quiebra, se producía la ruina de los inversionistas, los cuales perdieron
alrededor de $74 mil millones de dólares, en los cuatro años previos al
declive, más de 85 mil trabajadores en todo el mundo eran despedidos y con
fondos de ahorro de toda su vida perdidos, los que ascendían a más de 2000 millones de dólares, los
acreedores reclamaban por sus pagos que sumaban más de $67 mil millones de
dólares y los máximos directivos de Enron, eran acusados de fraude por inflar
cifras contables de la compañía.
Estas
repercusiones también cayeron sobre la firma Andersen, lo que ocasionó su
descrédito y la finalización posterior de sus actividades, más de 3000
empleados de los 8500 que contaba fueron despedidos. Los implicados del caso,
los ejecutivos y representantes del directorio, recibieron cada uno sentencia
por sus actos implicados, Jeffrey Skilling, fue sentenciado a 24 años de
prisión al ser encontrado culpable en 19 de los 28 cargos acusados (fraude,
falsedad y abuso de información privilegiada), Andrew Fastow, fue sentenciado a
6 años, luego de afirmar que colaboraría con las investigaciones. Kenneth Lay y
Clifford Baxter, tuvieron una peor suerte, el primero murió dos meses después y
el segundo se suicidó de un disparo.
(Escrito por: Tania Candia)
Análisis del Caso :
En esta época la mayoría de las personas
saben del caso Enron Corporation, que gracias las estrategias y la gran visión
de Kenneth Lay, Andrew Fastow y Jeff Skilling, se consolidó como la compañía
líder e innovadora en el mercado estadounidense. Pero como todo lo que brilla
no es oro, este gran imperio se vino abajo, y es así como se descubre todos los
malos manejos de los ejecutivos de la empresa. Por lo cual, al estudiar el
caso, anteriormente planteado, muchas preguntas saltan a nuestra vista: ¿Cómo
pudo esta empresa que en su tiempo “lo tenía todo” presentar todos estos
problemas éticos? ¿Pudo más la ambición de sus directivos, para que fueran en
contra de todo por alcanzar lo que querían?
Luego de los hechos acontecidos en el caso
Enron, la ética para los negocios no se volvió sólo una cuestión de moda, se
convirtió en una necesidad, un estilo de vida que tenía que estar presente en
las personas relacionadas al ámbito de los negocios, un esquema universal de
cómo debe ser una gestión ética en toda empresa.
Enron pasó de ser considerada la 7ma
corporación más grande de los EE.UU. a
ser una empresa repudiada con un catastrófico final. Tarde o temprano,
todo el imperio formado a base de engaños, manipulaciones, informaciones
fraudulentas caería, pero esto no sólo afectaría a los directivos implicados,
sino llevaría consigo a muchas más personas, que a verdad no tenían ninguna
relación con los malos manejos realizados por los líderes de la empresa. Al
parecer lo único que pasaba en la mente de los directivos era buscar su propio
enriquecimiento, y para lograrlo harían todo lo que estuviese en sus manos, no
les importó la gran cantidad de personas que quedaría desempleadas, tanto de su
propia empresa como de la auditora Andersen. Asimismo, la cantidad de
proveedores, 20 000 trabajadores e inversionistas que apostaron por esta
empresa que vieron en ella una oportunidad de hacer negocios, pero sus
ilusiones quedaron destruidas, ya que la mayoría perdió sus ahorros de toda la
vida al caer el valor las acciones, pues de un monto a otro las acciones de la
empresa valían 90 dólares, llegaron a un precio de 0.42 dólares.
Por otro lado, el accionar de los ejecutivos
trajo consecuencias muy graves en el mercado energético, todo este caos que se
ocasionó , no se hubiera dado sino fuera por la ambición y la avaricia de Kenneth Lay, Andrew Fastow y
Jeff Skilling, que cegados por obtener ganancias y reputación en el mercado
estadounidense perjudicaron a un centenar de personas.
Del mismo modo, la actuación de la empresa Arthur
Andersen deja mucho que decir, pues como es posible que una empresa auditora ejerza
la función de auditor interno y externo a la vez. Dicha empresa juega un rol
fundamental, pues si no hubiera ayudado a la empresa a maquillar sus estados
financieros, esta situación se hubiera descubierto lo más antes posible, y así
muchos de los inversionistas y proveedores se hubieran dado cuenta a tiempo y hubieran
dado un paso al costado. Por lo cual, este caso nos deja de enseñanza que desde
su comienzo, una empresa debe ser lo más transparente y sincera con el manejo
de sus negociaciones, eso incluye que los ejecutivos de más alto rango no se cieguen
por la ambición, y la visión sé que planteen desde un inicio sea la correcta
para el respectivo crecimiento de la empresa.
(Escrito por: Tania Candia y Solange Castillo)
Referencias: